14/5/10

Entre laurel y zarzales

(La duda declarada, 7)
ēgm.


Si pudiera.
Entre laurel y zarzales,
con la primera emoción
de pubis angelicales
me manchaba el pantalón.

Sólo a veces.
Di: Me apunto!
De momento
nos echamos p’adelante
y viramos en el viento,
qu’es bastante.
Pero luego
lucharemos hasta morir,
moriremos hasta vencer;
morir hemos,
vencer hemos.
Que es bastante.

Si pudiera.
Lo cubre todo el desierto,
solo lluvia,
con el tiempo pasa el tiempo
y hasta al tiempo
lo desmenuza el desierto
grano a grano;
solo lluvia,
polvo a polvo en el desierto.
Y al desierto,
solo tiempo,
solo lluvia
en mis ojos solo rojos,
lo descascarilla el tiempo.
Solo tiempo.

No pensar.
Entre zarzal y laureles,
alza el espectro sus dedos etéreos,
ávidas manos de luz en penumbra
tras un milenio de miedo y silencio
y oscuridad,
bajo las altas palmeras
de algún oasis perdido en la arena
del más antiguo desierto del mundo.
Bajo las viejas palmeras,
entre el laurel y las zarzas.

No pensar.
Aunque luego
alguien, somewhere put something in my drink,
somewhere put something in Madrid,
desde luego.
Digo: Flun!
en mi avioneta amarilla
que al viento descascarilla,
run, runrún.

Arrastra’o
como un cómic ondula’o
voy de la’o;
Endrik ama, y va de la’o
como un cómic, arrastra’o
por la tal Filomédea,
pues a todos nos afectan los actos
de Citerea, de hermosa corona,
la Risueña Afrodita,

va de la’o;
con la tal Filomédea,
porque de los genitales nació
que a Urano Cronos, su hijo, le cortara;
genitales en la mano
voy de la’o.

Sin buscarle
los tres pies al pato:
la historia es la historia
y los hechos son los hechos,
pero la historia no es los hechos
y los hechos no hacen la historia.
Así es la historia
de la noria de la Historia.
Y el pato
sigue teniendo dos patas,
una en Kuopio
y otra en el Fuendelasmatas.

Pero
si pudiera, solo a veces,
si pudiera no pensar;
si pudiera solo a veces,
solo a veces, no pensar.
Dime: Estás?
Digo: Flun!

Los cuatro jefes de la casa de Gingiz,
leones sin rival en la batalla,
guirnaldas de camelias en la tarde,
en un oasis yacen, en sus fuentes:

El primero murió en una emboscada
entre dunas y altos peñascales;
apousa, príncipe, no chan a testa
e coróate coas areas do deserto.

Reposa, príncipe, en el suelo tu cabeza
y corónate con las arenas del desierto.

El segundo a traición fue envenenado
y en el sueño sus sueños se durmieron;
a noite quéixase no teu fráxil sono
coma o falcón de El Rey na luva moura.

La noche se queja en tu frágil sueño
como el halcón del rey en guante oscuro.

Vilmente degollado fue el tercero,
incauto, en un banquete en tierra extraña;
rubio viño e rubio sangue nas mans e nas rosas,
e nas estrelas,ás que chamaba polo seu nome.

Rojo vino y roja sangre en las manos y las rosas,
y en las estrellas, a las que llamaba por su nombre.

Y el cuarto, el más amado, huyó al desierto:
los condes encontraron su cadáver
y junto a sus hermanos lo enterraron,
las hienas y los buitres le acogían;
ese para quén guirlandas de camelias
se trenzan silandeiras nos quenlles do serán
.
Ese para quien guirnaldas de camelias
se trenzan silenciosas en las cañadas del crepúsculo.

La casa de Gingiz se extinguió hace mil años.
Sus cuatro reyes en un oasis yacen,
y la dulcísima agua de diez fuentes
se escurre por los caños de sus huesos.
Leones que en la piedra de los siglos
recuerdan a los reyes su arrogancia.

El tiempo en el desierto, eternamente,
irá desmenuzando el polvo eterno.
Ojos rojos en la lluvia,
polvo en el lodo, sueños
que en el sueño se durmieron.

Dices: Veamos!
en mitad de la oscuridad,
etérea sombra.
Y el gallo de San Pedro,
buen pez marino,
del Mediterráneo al Mar del Norte,
sin que le importe,
no canta sinó gluba su destino.
Y no pensar.

Dime: Estás? egm09
Enamorándome más!
El señor Parvulesco cree
que se puede creer en el amor,
I belive in genteelness,
y después de morir, ser inmortal.
Leones en el agua de los siglos.
Luchando hasta morir,
muriendo hasta vencer.
Sin pensar

_____________________
Santa Rosa, Barcelona. Mayo 2009

referencias
pues a todos nos afectan los actos: Himnos homéricos,
A Afrodita
Cuéntame, Musa, las acciones de la áurea Afrodita, nacida en Chipre, que infunde a los dioses el dulce deseo y somete a las estirpes de los mortales, a las aves que pueblan los cielos, y a las bestias todas, tanto a aquellas que la tierra alimenta como a las que nutre el mar; pues a todos afectan los actos de Citerea, la de hermosa corona. (…)
porque de los genitales nació: Hesíodo,
Teogonía, 200
(…) Primero navegó hacia la divina Citera y luego desde allí fue a Chipre, que las corrientes envuelven. La bella y augusta diosa surgió del mar y bajo sus delicados pies brotaba la hierba en torno a sí. Afrodita, diosa nacida de la espuma y de hermosa corona, la llaman dioses y hombres, porque nació entre la espuma. Y también Citerea, ya que se dirigió a Citera; Ciprogenia porque nació en Chipre, de olas rodeada, y Filomédea pues de los genitales salió. (…)
I belive en genteelness: Jean-Luc Godard / François Truffaut,
A bout de soufle (Al final de la escapada)
Los cuatro jefes de la casa de Gingiz: A. Cunqueiro, Os catro chefes da casa Gingiz (Los cuatro jefes de la casa de Gingiz)  Ver
entrada

palabrario
Citerea. Epíteto de Afrodita, diosa griega del amor. Cronos.Urano. Filomédea. La risueña, o la de los genitales, según otra etimología, pues nació de los genitales de Urano(→), epíteto de Afrodita. Fuendelasmatas. Localidad del término municipal de Matasluengas, provincia de Tolencia. gallo de San Pedro. Pez de unos 70 cm, Zeus faber, abundante del Mediterráneo al Mar del Norte. Kuopio. Ciudad de Finlandia, capital de la provincia del mismo nombre, a orillas del lago Kallavesi. Parvulesco. Personaje de la película Al final de la escapada. Urano. El cielo, dios primigenio en la mitología griega. Hijo de Gea, la tierra, de la que tuvo varios hijos a los que no permitía salir del vientre de su madre, por lo que uno de ellos, Cronos, armado con una hoz proporcionada por la misma Gea, le cortó los genitales lanzándolos sobre su espalda; éstos cayeron al mar donde flotaron durante mucho tiempo, formándose a su alrededor una espuma blanca de la que nació Afrodita, la diosa del amor.

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